Si nunca has oído hablar de los metadatos, es muy probable que los asocies solo al mundo de la informática y de los entornos virtuales, sin embargo hay más por decir. Las empresas utilizan metadatos para gestionar la información con efectividad. Si quieres saber más ¡sigue leyendo!
¿Qué son los metadatos?
Para explicarlo claramente, los metadatos son datos que describen a otros datos, es decir: un grupo de datos son utilizados para describir la información de un archivo, recurso o, simplemente, de otros datos. El concepto mismo de metadato es incluso anterior al origen de Internet, pues se ha utilizado en el mundo real antes que en el virtual: los catálogos de bibliotecas o las fichas, por ejemplo, son un grupo de datos. En cambio, cuando hablamos del plano digital, si miramos un email, la fecha y hora de envío o la localización desde donde se envía son tipos de metadatos.
Los metadatos pueden guardarse, procesarse o intercambiarse, pero su función básicamente es identificar, clasificar, localizar, describir o recuperar información de algún archivo o contenido determinado. Como dato de color, vale decir que poseen un ciclo de vida que se divide en tres fases: creación, manipulación y destrucción. La digitalización y la constante búsqueda de información han generado gran interés por los metadatos, pues han facilitado el trabajo de los usuarios, acelerando en este proceso la productividad de las empresas.
Clases de metadatos
Aunque existen muchos tipos de grupos de datos, a grandes rasgos encontramos los siguientes grupos en base a sus funciones:
Descriptivos. Como indica su nombre, estos datos describen e identifican la información de los recursos y permiten la búsqueda y recuperación de información a los usuarios. Por ejemplo, ofrecen información de los atributos bibliográficos de un libro o artículo, desde el título, autor o el idioma. Los metadatos descriptivos pueden clasificarse en función a tres criterios esenciales: el contenido, la variabilidad o la función.
Estructurales. Facilitan la navegación y presentación de recursos, ofreciendo información sobre la estructura interna de documentos o uniendo archivos y textos relacionados. Un ejemplo serían el índice, capítulos o tabla de contenidos de un archivo.
Administrativos. Permiten la gestión y el procesamiento de colecciones digitales. Incluyen datos técnicos, gestión de derechos y control de acceso y uso. Si tomamos de ejemplo una foto, éstos ofrecen información sobre su formato, la compresión o la fecha del registro de derecho de autor.
Lenguaje de marcas. El lenguaje de marcas integra etiquetas o metadatos con información adicional sobre otras características estructurales o semánticas de un recurso. Un claro ejemplo es el lenguaje HTML.
Algunos ejemplos de grupos de datos
Para ser más claros e ilustrar lo explicado con un ejemplo aquí te facilitamos dos:
- Cuando hacemos una foto. La cámara captura la imagen y a la vez va guardando, en forma de metadatos, información de cómo fue tomada: fecha, hora, velocidad, modo de captura, etc.
- Cuando escuchamos una canción. La melodía que escuchamos es el dato, mientras que los metadatos son la información relacionada con el título de la canción, el álbum, el autor, el género, entre otros.
Fuente: Fintech School
