El futuro llegó hace tiempo. Hoy tu casa domótica ya no es un sueño imposible, el avance de la tecnología nos ha permitido lograr niveles de conectividad impensables hace años. Tu hogar puede tomar un papel activo a tu servicio en el presente. Si te apasiona la tecnología y estás pensando en ampliar tu formación en este ámbito, no te pierdas nuestro Curso Robótica. Por lo demás, hablaremos un poco de cómo automatizar tu casa.
¿Qué es una casa domótica?
El término domótica nace de la conjunción del vocablo latinos domus (casa) y el griego autónomo y refiere a la posibilidad de automatización y control de los sistemas de tu hogar. Esta tecnología suele aplicarse utilizando, generalmente, dos métodos: el sistemas de conectividad alámbrica, es decir por medio de cables eléctricos, circuitos de fibra óptica u otros; o bien, mediante la conectividad inalámbrica vía WiFi o Bluetooth.
Las posibilidades de inteligencia que ofrece la tecnología para una casa domótica suponen la integración de diferentes aplicaciones innovadoras que facilitan el control de los elementos e incluso objetos que han sido tradicionalmente de uso manuales.
¿Para qué puedo utilizar la domótica?
Si quieres automatizar tu vivienda y convertirla en un hogar inteligente, el primer paso será entender en qué ámbitos podrás aplicarla. Aquí te damos algunas pautas para ello:
Ahorro energético
Sabemos que la generación y el ahorro de energía son cuestiones fundamentales en el mundo de hoy, por ello, la domótica se preocupa en en gran medida de hacer que tu casa sea lo más sustentable posible y que ahorre tantos recursos como le sean posibles. El uso de las energías limpias, renovables y sustentables son una de las principales tendencias mundiales y, en este sentido, una práctica tecnológica de este calibre no puede quedar desligada de dicha responsabilidad.
Unas buenas estratégicas para optimizar tu vivienda domotizada pueden ser las siguientes:
- Apps para programar y zonificar la climatización. Con estas aplicaciones podemos realizar una climatización localizada de los diferente espacios de nuestro hogar, sin la necesidad de calefaccionar o enfriar toda la vivienda. Una de las mejores cosas es que podrás programarla, por lo que puede iniciarla unos minutos antes de arribar para que el ambiente esté a la temperatura ideal sin la necesidad de dejar encendida la climatización todo el día, ahorrando mucha energía y dinero en el medio.
- Racionalizar el uso de energía. Aunque muchos no lo sepan, la mayoría de los electrodomésticos no se apagan, sino que se mantienen en un constante estado de stand by, incluso sin que los utilices. Así, la televisión, el horno, el microondas, continúan forzando un gasto energético innecesario en tu hogar. Una solución eficaz es instalar enchufes inteligentes para estos electrodomésticos, pudiendo programarlos para su encendido cuando sea necesario.
- Tarifa adecuada para tu hogar. Si por lo general no hay nadie en tu hogar durante buena parte del día puedes reducir la potencia contratada de la compañía, de este modo verás reducida la factura de la luz sensiblemente.
- Uso de energías renovables. Aunque en algunos lugares como en España la legislación es algo caótica, la oferta de energía limpia no deja de crecer. Puedes adquirir baterías de acumulación para dar soporte eléctrico a la vivienda de manera eficiente.
Confortabilidad
Brindarte comodidad y mayor calidad de vida es uno de los mayores objetivo de una casa domótica. Tu hogar inteligente además de prever que aumenten tus facturas, te ayudará a no necesitar levantarte de tu sofá para subir o bajar una persiana. Estos son algunos de los ajustes que puedes realizar para aumentar tu confort y comodidad aprovechando las ventajas de una casa domótica:
- Automatización del alumbrado. Podrás controlar todas las luces por control remoto desde las terminales diseminados por la vivienda o bien desde tu móvil o tablet.
- Sistemas de regulación de la luz. Esto te ayudará a ahorrar energía, pero también proporcionar un ambiente distinto y personalizado a cada espacio de la vivienda.
- Control de la vivienda desde la dispositivos moviles. Toda tu casa podrá ser controlada desde tu móvil, ganando en comodidad. Podrás ver quién llama a tu puerta o programar el horno para que esté caliente la comida al llegar. Las posibilidades son muchísimas.
- La conexión a Internet. Esto es imprescindible para que tu casa tenga el mote de smart. La conexión a Internet te permitirá realizar las compras desde tu hogar o desde tus electrodomésticos, que leerán que productos están faltando, incluso podrán programarse acciones automáticas para la vivienda según el estado meteorológico, la fecha o las horas.
La seguridad
Esta es otra los elementos centrales que tu casa inteligente debe satisfacer. La domótica ha desarrollado sistema de seguridad inteligentes que te ahorran dolores de cabeza ya que podrás:
- Programar luces. De manera automática o por control remoto, de modo que den la apariencia de que la casa no está vacía.
- Instalación de cámaras de videovigilancia. Esto incluye sistemas de alarma o de detección de movimientos monitorizados que permitan el encendido de cámaras de seguridad y que se emitan directamente en tu móvil. Así podrás saber y grabar lo que ocurre en tu domicilio mientras te comunicas con la policía.
- Detección precoz. Además de detectores de movimientos, también podrás instalar detectores de fuga de gas, de indicios de incendio y otras múltiples emergencias. Será tu propia casa quien te avisará estés donde estés y, además, llamará por sí misma a los servicios de emergencia. ¡Increíble!
- Control de los accesos. Permite el cerrado automático o de forma remota de las puertas de tu hogar, incuso también de las ventanas, el garaje, o cualquier otro método de acceso, sin importar la distancia a la que te encuentres, solo necesitarás tocar la pantalla de tu móvil o tablet.
El origen de la robótica doméstica
Esta aplicación de la robótica orientado al confort domestico tiene sus origines a comienzos de la década de los setenta del siglo XX. Fue en ese entonces cuando se dieron las primeras apariciones de los equipos automáticos para edificios. Aunque la tecnología era muy diferente y no se asemeja a la actual, fue un gran comienzo. Ya en la década de los ochenta, surgieron los sistemas automatizados integrados con distribución comercial y poco después ya empezaron a ser adquiridos por particulares. Los sistemas eléctricos mutaron con la electrónica hasta convergir con ella, creando entornos de comunicación entre los dispositivos y la vivienda.
La informática fue la que posibilitó dar el siguiente paso, los sistemas domóticos comienzan a ganar popularidad en países donde la tecnología tiene una difusión más elevada como Estados Unidos, Japón y Alemania. Así fue como se terminaron incorporando en los edificios de viviendas diferentes Sistemas de Cableado Estructurado. Este tipo de cableado facilitó la conexión entre terminales dentro de redes de comunicación electrónica. Aquellos serían los primeros edificios llamados propiamente “inteligentes”, que pusieron sus servicios de automatismo a disposición de los inquilinos.
Fuente: ESNECA Business School
