El aprendizaje cooperativo es una herramienta muy útil para sacar el máximo rendimiento a un equipo de trabajo. De hecho, a lo largo de la vida laboral se deben tomar muchas decisiones conjuntas que afectan nuestra carrera profesional. Por ejemplo, las reuniones son una pieza clave para poner en común ideas y proyectos. Aunque a veces suelen generar discordia y momentos de tensión, estos encuentros también sirven para aprender a escuchar y para crear más compenetración entre compañeros. Así pues, a día de hoy, a nadie le parece extraño que las decisiones laborales se tomen de forma consensuada. En el ámbito académico, en cambio, la cooperación tiene aún mucho terreno por avanzar.
Los exámenes en grupo son una forma de evaluación relativamente moderna que, más allá de los contenidos, valora la capacidad de interacción, cooperación y convivencia de los alumnos. En un mundo cada vez más individualizado, este sistema puede generar algunas fricciones. ¿Qué podemos hacer si nos sentimos a gusto con nuestros compañeros? ¿Cuál es la mejor fórmula para aprovechar las capacidades de cada persona? ¿Cómo hay que gestionar los conflictos? Si estás poco habituado a los exámenes en grupo y te preocupa la evaluación, ten en cuenta estos aspectos:
- El examen en grupo no acostumbra a ser el único elemento de valoración: los docentes también recurren a trabajos escritos, exposiciones orales o exámenes individuales.
- Para evaluar de forma más precisa, el profesor puede establecer una puntuación grupal y una individual.
- Los docentes que optan por este tipo de métodos suelen valorar los resultados con otros parámetros. Por ejemplo, la evolución personal, la satisfacción del grupo o la creación de futuros proyectos.
5 ideas para superar un examen en grupo
- Miraos todo el temario. Que el examen sea en grupo no significa que no debas dominar todos los contenidos evaluables. Aunque te centres una parte, recuerda que necesitas una perspectiva global para rendir adecuadamente. Hay que confiar en los compañeros, sí, pero también es recomendable asistir al examen con seguridad en uno mismo.
- Elaborad un plan de estudios. Repartíos los temas y quedad para practicar. Estos ensayos os ayudarán a identificar los puntos débiles y los puntos fuertes de cada persona. Cuando se trabaja en grupo, es especialmente importante cumplir con los plazos: no solo respondemos por nosotros mismos, lo hacemos por todo el grupo.
- Escuchad a vuestros compañeros. No hay aprendizaje cooperativo sin voluntad de escuchar. Una buena comunicación os ayudará a resolver los conflictos que se puedan plantear.
- Intentad hacer una exposición equilibrada. Trabajar en grupo implica generar un sentimiento de equipo. Cuando nos examinamos, debe haber una relación entre iguales. En otras palabras, ningún compañero puede adquirir más protagonismo que otro. Evitad las ganas de marcar la diferencia y repartid de manera equitativa las tareas.
- Sed receptivos con las críticas. Si una actividad académica es responsabilidad de más de una persona, es probable que debamos rendir cuentas del trabajo hecho. Esto implica estar dispuesto a recibir críticas y tomarlas como una oportunidad para mejorar. Por una parte, las observaciones de los compañeros ayudarán a mejorar el contenido del examen. Por otra, las aportaciones de los profesores te serán útiles en nuevas actividades grupales.
¿Eres docente y recurres a menudo a los exámenes en grupo? ¿Has afrontado alguna prueba grupal en tu vida académica? No te olvides de trasladarnos tu experiencia en un comentario.
