En los últimos años, el mercado profesional ha tenido una evolución significativa en cada una de las áreas laborales. Esto se debe principalmente a las nuevas propuestas que, día a día, traen las nuevas tecnologías de la información y la comunicación.
Sin lugar a dudas, el efecto de la globalización es una de las principales causas del cambio. En este contexto, las necesidades de las personas también han cambiado, y con ellas, el mundo laboral. Por ejemplo, muchas empresas de hoy en día demandan profesionales que cuenten con unas buenas competencias tecnológicas. Así mismo, son muchos los nuevos perfiles que actualmente están apoderándose del mercado laboral.
Y precisamente, uno de los más demandados es el del Growth Hacker. En el artículo de hoy te contamos todo lo que necesitas saber acerca de una de las profesiones más demandadas en la actualidad. ¡Continúa con nosotros y entérate de cada detalle!
DEFINICIÓN:
¿Qué es el Growth Hacking?
Se puede decir que esta es una palabra de uso prácticamente reciente. El término Growth Hacking comenzó a utilizarse por primera vez en el 2010 por Sean Ellis para referirse al crecimiento o viralidad a través de soluciones creativas.
Es decir, el Growth Hacking es una disciplina enfocada en el desarrollo de estrategias para promover el crecimiento de una empresa, pero aplicando el mínimo de gastos y esfuerzos posibles. Esto con el objetivo de aumentar en el menor tiempo posible el número de clientes, ingresos, impactos o usuarios interesados en los productos o servicios de la empresa.
Este trabajo es uno de los más demandadas en la actualidad, pues los mercados cada vez son más digitales y el nivel de competencia es cada vez más alto entre las empresas.
FUNCIONES:
¿Qué hace un Growth Hacker?
Esta es una labor, como la mayoría de las que están relacionadas con la tecnología, que cuenta con una gran flexibilidad y atención al detalle. A continuación, te contamos cuáles son las principales funciones de un Growth Hacker:
- Diseñar estrategias de marketing basadas en los objetivos a corto, mediano y largo plazo de la empresa en cuanto al impacto en usuarios, la captación de clientes y la conversión ventas.
- Realizar un análisis detallado de las métricas o KPI para la toma de decisiones.
- Estudiar el comportamiento de la marca a través de la interacción de los usuarios con la empresa, bien sea en redes sociales, tráfico al sitio web, llamadas telefónicas u otros medios.
- Crear y poner en marcha distintos tipos de campañas creativas de marketing digital para promover productos o servicios.
- Analizar los diferentes canales de crecimiento del ecommerce con el objetivo de optimizarlos día a día.
- Idear contenido creativo con tendencia a la viralidad para que genere alto impacto en el usuario objetivo.
- Posicionar las redes sociales de la marca para promover el crecimiento a través de la interacción con el consumidor.
FORMACIÓN:
¿Qué estudiar para ser Growth Hacker?
La formación profesional del Growth Hacker es muy amplia y diversa, pero básicamente se enfoca en todo lo relacionado con el marketing digital, redes sociales y, en general, negocios por internet.
Hoy en día, el mercado educativo cuenta con varias ofertas formativas con las que te puedes convertir en un gran profesional en este campo e ingresar al mundo laboral con todas las habilidades que se requieren. No obstante, al ser una carrera emergente, no existe una carrera como tal que te otorgue el título de Growth Marketing Manager.
En este contexto, lo más recomendable es comenzar con una carrera relacionada con el marketing digital y la comunicación. Por ejemplo, un grado en Marketing Digital, o un curso en Community Management, E-marketing, etc.
Posteriormente, puedes continuar con un curso de especialización en Growth Hacking, un postgrado o un máster.
PERFIL:
¿Qué competencias y habilidades debe tener un Growth Hacker?
Este puesto de trabajo requiere que el profesional cuente con ciertas habilidades básicas para que el desarrollo de cada una de las actividades puedan llevarse a cabo de manera fluida. Por ejemplo:
- Atención al detalle
- Flexibilidad
- Liderazgo
- Capacidad de análisis
- Creatividad
- Facilidad para el trabajo en equipo
- Buena comunicación
- Gusto por las tecnologías
- Curiosidad por nuevos conocimientos
SALIDAS PROFESIONALES:
¿Dónde trabaja un Growth Hacker?
El profesional en Growth Hacking es muy versátil y puede desempeñarse en varios ámbitos empresariales.
Hoy en día, la mayoría de las empresas de cualquier sector necesitan en su equipo de profesionales un Growth Hacker. Así que, la oferta laboral es verdaderamente amplia. Puedes desarrollarte como trabajador autónomo o freelance; de esta manera, podrías asumir distintos proyectos por tu propia cuenta, puedes ofrecer tus servicios e inclusive especializarte en algún sector en especial.
EMPLEABILIDAD:
¿Hay empleo? ¿Cuál es el salario medio de un Growth Hacker?
Claramente sí, hay mucho empleo en este campo. La razón es el rápido crecimiento del mercado digital y la necesidad de cubrir las demandas del mundo empresarial.
En cuanto al salario de un profesional en Growth Hacking, es importante resaltar que depende en gran medida de varios factores, como la formación profesional y la experiencia. Sin embargo, el promedio salarial de este perfil se encuentra entre los 30.000 y los 35.000 € al año; es decir, entre 2.500 y 3.000 € mensuales.
FAQs:
Preguntas frecuentes sobre la profesión de Growth Hacker
Si en realidad te apasiona este campo profesional y quieres enfocarte en ello, lo único que tienes que tener son las ganas y la curiosidad para comenzar a formarte. Puedes comenzar realizando un curso de marketing digital y luego cursar un postgrado o máster en Growth Hacking. Sin embargo, esta es una de las profesiones que requieren de formación constante para mantenerse a la vanguardia de las novedades en el mercado.
En general, no existe un tiempo estándar de duración para un curso de Growth Hacking, todo depende más del tipo de programa que se elija y el centro educativo. Sin embargo, usualmente estos cursos duran entre 4 y 12 meses.
Definitivamente, esta es una profesión que va de la mano con la tecnología. Por ello, algunas de las herramientas que se utilizan en el ejercicio cotidiano pueden ser las plataformas de gestión de datos web, las aplicaciones para realizar auditorías de sitios web y comprobar la visibilidad y el alcance de las campañas de marketing y, así mismo, las herramientas de interacción con los usuarios.
