¿Cómo se puede cultivar una relación sentimental saludable? ¿Es normal masturbarse diariamente? Aunque la educación sexual está incluida en el currículum escolar, el programa está obsoleto. Es una de las conclusiones a las que ha llegado el psicólogo Jaume Funes. Además, añade Funes, todos los estudios indican que los adolescentes reproducen relaciones de sumisión y dominación, a pesar de que ellos creen que practican la libertad en sus comportamientos sexuales. Por esta razón, es completamente necesario combatir la desinformación y los estereotipos heteropatriarcales que se transmiten por medio de la televisión e Internet. En consecuencia, hay que educar para «llegar a ser uno mismo, aprender a querer y construir y practicar la libertad sexual», afirma el psicólogo.
Esto mismo es lo que piden los estudiantes de educación secundaria españoles, que en noviembre se manifestaron para acabar con el machismo en las aulas y para exigir la creación de una asignatura de educación sexual inclusiva, evaluable y obligatoria. Los adolescentes se plantean cuestiones como las siguientes en la obra Youth4, que se representa este noviembre en el TNC de Barcelona: «un quiqui o hacer el amor es lo mismo pero hay más cariño en el segundo» o “soy libre pero no para los otros porque soy bisexual, y la gente no lo entiende, y eso me hace sentir no-libre». Está claro que la educación sexual es un asunto pendiente en la enseñanza secundaria obligatoria. ¿Y tú? ¿Has recibido una educación sexoafectiva satisfactoria durante tu etapa escolar? ¿Crees que tendría que mejorar? ¡Explícanoslo en un comentario!
¿Qué podemos aprender sobre la demanda de más educación sexual?
- No hay una mala edad para hablar de sexo y relaciones personales. Aunque hablar de relaciones sexoafectivas con los adolescentes puede provocar cierto respeto, hay que dejar cualquier prejuicio atrás. En otras palabras, nadie dice que sea fácil sacar este tema a la palestra, pero se trata de adaptar el discurso según la edad de los alumnos. En resumen, hay que exponer el mensaje con naturalidad y, sobre todo, sin ningún tipo de vergüenza.
- Los estereotipos patriarcales, completamente vigentes. El porno de Internet y los tópicos de series y películas de televisión, entre otros, contribuyen a reproducir las conductas machistas, que de esta manera se fijan en el subconsciente de los jóvenes. Así, sexo y dominación quedan asociados en el circuito del placer. Una educación basada en la libertad y el respeto mutuo es necesaria para combatirlo.
- La escuela, piedra angular de la formación afectiva. «Educar en sexualidad es educar en las primeras veces, las primeras sensaciones de intimidad con otro, el primer beso, la primera relación, la primera vez que se enamoran… teniendo en cuenta que no tienen bagaje y que están envueltos de adultos –como los padres– que no quieren que tengan estas aventuras o prefieren desconocerlas”, opina Jaume Funes. Es evidente que cuanto antes se eduque en sexualidad, mejor para los adolescentes. Y, por esta razón, es tan necesario que comience ya en la educación obligatoria.
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Fuente: La Vanguardia
