Hyperloop Pod Competition 2019, concurso internacional para universidades cuyo objetivo es definir el futuro de la movilidad, ha reconocido el prototipo Turian de la Universitat Politècnica de Valencia (UPV) con el Premio a la Innovación.
La cuarta edición de este concurso, celebrado del 14 al 21 de julio en Los Ángeles y organizado por Space X y la empresa The Boring Company, ha seleccionado este pod de estudiantes de ingeniería de la UPV como uno de los mejores 8 prototipos de la competición. El equipo ha contado también con Federico Abascal, exalumno del Título Superior en Diseño de Transporte del IED Barcelona Escuela Superior de Diseño, para liderar el diseño exterior del proyecto.
Hyperloop UPV, que ha contado con el patrocinio del IED Barcelona, es el único participante español en llegar hasta la fase final de esta competición universitaria en torno a un nuevo concepto de movilidad ideado por Elon Musk y Space X: un transporte de pasajeros y mercancías a más de 1000km/h, en cápsulas flotantes dentro de tubos de baja presión y con un coste de energía inferior al de cualquier otro medio de transporte.
«Hyperloop es el transporte del futuro. Un prototipo que apunta hacia dónde va la sociedad y las mejoras que debemos proponer para llegar a un futuro sostenible y realmente innovador», explica Abascal, que ha formado parte de todo el proceso de diseño de Turian, desde la conceptualización, los sketches y los renders hasta el modelaje y la comunicación gráfica.
Más de mil piezas y una carcasa de fibra de carbono lo componen. Con un peso de 96 kilos y 500 sensores que miden todos los parámetros de su funcionamiento, consigue acelerar de 0 a 100 Km/h en menos de 2 segundos. En cuanto a su diseño, destacan sus volúmenes «sinuosos, acelerados y curvos», especialmente en los hombros, que el diseñador define como «animales y agresivos».
«El desafío de la parte del diseño –añade– estaba en la aerodinámica y en la viabilidad de la producción, ya que se trata de un prototipo que circula a alrededor de unos 500 km/h». Además, era fundamental crear un diseño compacto para circular dentro de los túneles de Hyperloop y cuya fabricación fuera factible.
El prototipo ha sido seleccionado entre 700 universidades de 50 países y durante la semana de testeo en Los Ángeles superó cerca de 70 test y validaciones por parte de ingenieros de Space X. Esto le permitió situarse en el grupo a la cabeza del reto, aunque debido a algunos problemas técnicos en la recta final no pudo correr en el tubo vacío.
«Ser parte de este equipo ha significado algo más que un reto profesional. Entre nosotros hemos aprendido muchísimo. Hemos sido docentes y alumnos. Como se trata de generar innovación, no tenemos respuestas, así que tenemos que crearlas nosotros», concluye Abascal.
Fuente: IED Barcelona
