¿Qué necesito para ser recepcionista en un centro médico?

En todo centro médico, nuestro primer contacto es el recepcionista. Este profesional se encargará, entre otras funciones, de la gestión del centro. Además, cumplirá tareas administrativas y de registro de citas para los pacientes, por esto, para dar con este perfil es necesario buscar una serie de aptitudes acorde a las funciones que deberá realizar, como habilidades de atención al cliente y de gestión de tiempo. Además, sus aptitudes deben reforzarse con formación específica

A continuación te contamos todo lo que necesitas saber sobre este puesto de trabajo.

¿Cómo es el perfil profesional del recepcionista de una clínica?

Los recepcionistas serán siempre la primera y última persona que el paciente verá, por lo que es muy importante que cause una buena impresión, no solo por su eficiencia, sino principalmente por el trato.

El primer gran requisito para un recepcionista médico será estar interesado en la salud y cuidado de las personas, pues, ante cualquier consulta de un paciente, este deberá tener la capacidad de comunicarse claramente y de manera profesional. Asimismo, al tratarse de un trabajo que se realiza de cara al público, es imprescindible ser amable y servicial con los pacientes, pues, no debes olvidar que  tratas con gente con dolencias.

Durante el día puede surgir alguna emergencia y eso puede provocar que se acumule el trabajo. Por este motivo, el recepcionista debe ser capaz de continuar bajo presión y debe saber priorizar las tareas para así organizarse correctamente. Y más aún, entre sus habilidades debe ser capaz de gestionar la información confidencial de los pacientes.

Si nos centramos en los aspectos más técnicos, el recepcionista debe saber manejar las herramientas  de ofimática; debe tener conocimientos de contabilidad y habilidades en mecanografía; debe contar con una actitud asertiva, ser educado y observador, pues eso lo ayudará a realizar mejor su trabajo. Y, si comparte espacio y profesión con más miembros, debe saber trabajar en equipo y tomar la iniciativa. El liderazgo siempre es un plus.

Principales tareas del recepcionista

Las funciones de un recepcionista pueden variar según el tipo de centro médico, no obstante, existen muchas tareas transversales a la profesión que se centran en la atención al cliente y en proporcionar la información que necesiten. Ahora, también existen otras que son más específicas:

• Atención telefónica y personal. El recepcionista es el encargado de recibir y contestar las llamadas. También debe encargarse de los correos electrónicos, avisos y certificados. En la consulta, debe atender a los pacientes y sus peticiones, así como sus dudas. Todo ello con un trato personalizado.
• Mantener ordenada la recepción y las salas de espera. Es decir, organizar el material de lectura o los folletos informativos y revistas de salud.
• Actualizar las fichas de los pacientes con los datos personales correctos.
• Asegurarse de que los informes de los pacientes estén disponibles para el personal sanitario.
• Elaborar presupuestos en función de las indicaciones que le facilite el médico.
• Encargarse de funciones administrativas. Por ejemplo, procesar textos, adquirir materiales de oficina u organizar y almacenar informes médicos.
• Ayudar a los usuarios que utilizan el sistema online para pedir cita al médico.
• Mantener la confidencialidad de los pacientes.

¿Qué tipos de centros sanitarios existen?

Todo centro sanitario, como su nombre lo indica, se encarga de la asistencia y de los cuidados de la salud de los pacientes que allí ingresan y, dentro de estos establecimientos, se encuentran los profesionales médicos que desempeñan las tareas de cuidados. En España existen diferentes tipos de centros sanitarios. Veamos cuáles son los principales:

• Centros de Atención Primaria (CAP)

Los CAP son centros sanitarios públicos con una estructura más pequeña. En ellos, los médicos de familia, pediatras, enfermeros y el personal administrativo atiende a los ciudadanos en un primer nivel sanitario. Además de las consultas, también posee un área de extracción de sangre para análisis y un área de atención de urgencias, equipada con los materiales necesarios. Estos centros también son conocidos como ambulatorios.

• Hospitales

Estos centros de mucho mayor tamaño están destinados a la atención y asistencia a enfermos y disponen de instalaciones con mayor tecnología, instrumentos y fármacos específicos. En ellos, además, trabajan facultativos, enfermeros, personal auxiliar y diversos servicios técnicos.

Existen tres clases de hospitales: de primer, segundo y tercer nivel de complejidad según se atiendan pacientes con afectaciones de distintos niveles. En este sentido, pueden ser simples, gravísimas, críticas, cuidados paliativos o terminales.

• Clínicas especializadas

Estos centros son mayoritariamente privados y ofrecen unos servicios médicos más específicos, como por ejemplo, las clínicas dentales o las oftalmológicas. Por tanto, en ellas trabajan profesionales sanitarios que se han especializado en algún campo de la medicina. Las plantillas de las clínicas normalmente están formadas por el recepcionista, los auxiliares de medicina y los distintos especialistas.

En una clínica dental, por ejemplo, los recepcionistas deberán conocer los distintos tratamientos que se ofrecen y en qué consisten, mientras que los auxiliares se encargarán de las limpiezas bucales y de asistir al especialista. Finalmente, el médico será el encargado de los casos que requieran más dificultad, como una extracción de muelas o tratar caries.

Documentación sanitaria existente

Todo centro sanitario maneja documentación específica, de hecho, los documentos sanitarios sirven para dejar constancia de las tratamientos que un paciente ha estado llevando, por lo que mantienen un registro de los tratamientos y facilitar información a los sanitarios. Sin embargo, existen dos tipos de documentos: los clínicos y no clínicos. A continuación te los resumimos.

• Documentación clínica

Este tipo de documentos se generan a partir de la atención directa con el paciente. Dentro de éstos se encuentran los de uso clínico en Atención Primaria y hospitalario. El documento clínico de uso hospitalario por excelencia es la historia clínica. Este documento registra todas las actuaciones del equipo sanitario con el paciente. También informa de su estado de salud o enfermedad. Los datos recopilados sirven para hacer un seguimiento de la evolución del paciente. Además, ofrece información a los distintos equipos médicos.

• Documentación no clínica

Mientras que los segundos sirven para registrar las necesidades indirectas que afectan a la organización y funcionamiento del hospital o clínica. Normalmente son utilizados por los distintos servicios del hospital, ya sea desde Administración, Urgencias o Cocina. Por ejemplo, estos serian los documentos contables, albaranes o solicitudes.

Fuente: Inenka Business School