¿A qué se dedica un logopeda?

La logopedia es la disciplina que se ocupa de tratar y prevenir los trastornos del lenguaje. Estas alternaciones pueden estar relacionadas con la voz, el habla, la gestualidad o la audición. Imagina que un día tienes un accidente de coche y una lesión cerebral afecta tu capacidad de hablar. En este caso, tendrás que ponerte en manos de un logopeda. También las personas sordas o con tartamudez suelen tratarse en la consulta de un logopeda. Sin embargo, no es necesario tener un trastorno grave para acudir a este profesional. Muchos periodistas o cantantes que necesitan mejorar su vocalización buscan asesoramiento especializado. De la misma manera, la dificultad para pronunciar un sonido puede resolverse con ayuda. 

Como ves, los ámbitos de actuación del logopedia son muy amplios y variados. Por este motivo, se convierte en una opción profesional sólida y atractiva. De todas, formas tienes que tener en cuenta que se trata de una ciencia multidisciplinaria. Así pues, tendrás que entrar en contacto con otras disciplinas como la fonética, la neurología o la psicología. Eso sí, no te asustes si alguna especialidad no te interesa tanto como otra. En una profesión con tantas posibilidades, es habitual que algunos campos nos llamen más que otros. De hecho, hay logopedias que solo se dedican a la gente mayor, mientras que otros prefieren centrarse en los niños o en las personas con alternaciones neurológicas. ¡Tú decides qué camino te atrae más!

¿Qué tengo que estudiar para ser logopeda?

El camino más frecuente para convertirse en logopeda es cursar el Grado en Logopedia. Esta carrera tiene una duración de cuatro años y puede cursarse presencialmente o online. Como ya debes suponer, el grado te dará las bases generales que todo logopeda necesita para ejercer. Posteriormente, puedes especializarte cursando un máster. Los másteres suelen alargarse uno o dos cursos y abarcan ámbitos muy diversos. Te mostramos algunos ejemplos:

• Logopedia escolar.
• Cuidados de la voz en la atención telefónica.
• Necesidades educativas especiales.
• Atención temprana.
• Daño neurológico. 
• Trastornos del lenguaje y de la audición.
• Experto en voz.

Si provienes de un grado relacionado con la logopedia, como Psicología, Medicina o incluso Filología, puedes plantearte cursar un máster directamente. En todo caso, para poder ejercer necesitas estar en posesión de un máster habilitante o profesionalizante.

¿Dónde podré trabajar como logopeda?

A menudo, solemos pensar erróneamente que todos los logopedas trabajan en el ámbito de la sanidad. Aunque la sanidad aporta muchos puestos de trabajo, no es la única opción. Estas son algunas de las salidas más frecuentes:

• Sanidad: centros de rehabilitación, hospitales, centros de salud mental, unidad de servicios neurológicos, etc.
• Educación: escuelas, institutos, centros de educación especial, unidades de asesoramiento pedagógico, etc.
• Asistencia social: residencia, centros de día, asociaciones, etc.
• Otros ámbitos: medios de comunicación, asesoramiento a cantantes, docencia e investigación, etc.

¿Te interesan especialmente los trastornos del lenguaje? ¿Quieres dedicarte a asesorar a periodistas y a cantantes? Consulta la oferta de grados y másteres en Emagister y convierte en un profesional de la logopedia. ¡Solo tienes que decidir con cuál te quedas!

Actualizado en marzo de 2022.