¿Te imaginas poder estudiar y, a la vez, conocer gente de 85 países diferentes? Alberto García lo ha hecho. Un estudiante de 21 años ha compartido bachillerato con 200 alumnos de todo el mundo, en un colegio internacional de Armenia. Una experiencia que le ha llenado de conocimientos, aprendizaje, cultura y vida.
Una infancia llena de experiencia
El granadino creció en Zaidín, en España. Los colegios de sus primeros pasos fueron Alcazaba, el Sierra Nevada y el IES Soto de Rojas. “En estas instituciones tuve la inmensa suerte de contar con unos profesores excepcionales, y sin duda alguna, sin su pasión, esfuerzo y motivación continua no habría sido capaz de llegar hasta donde me encuentro hoy en día”, asegura el joven. Seguidamente decidió desplazarse e ir a estudiar en Dublín, Irlanda, y con esta vivencia se dio cuenta de las posibilidades que existían fuera de su zona de confort.
Armenia y un bachillerato multicultural
El recorrido y esfuerzo del estudiante le han permitido formarse en institutos y universidades mundiales de referencia. Además, sus resultados académicos excepcionales le han brindado la oportunidad de solicitar becas importantes como las de los Colegios del Mundo Unido (UWC). Tras rigurosos procesos de selección, fue seleccionado para estudiar el bachillerato en UWC Dilijan, en Armenia. Tal y como asegura Alberto, la elección de los alumnos para acudir a este centro no solo se debe al nivel de inglés, por ejemplo, sino también a “las ganas de aprender, el compromiso social y el liderazgo”.
En Armenia Alberto afirma que vivió la etapa más feliz de su vida. Creció en ámbito académico, le cautivó la hospitalidad de la gente, hizo buenos amigos y aprendió ruso. “El país es una joya cultural y natural”, confiesa. Compartir los estudios posteriores a la secundaria con alumnos de todo el mundo es una suerte y el estudiante lo hizo con 200 adolescentes. “Se puede decir que UWC es la ONU en miniatura”, puntualiza el joven.
¿Dónde estudia, ahora, el estudiante?
El granadino fue aceptado y becado en Duke University en Carolina del Norte para hacer el segundo curso de bachillerato, donde estudia actualmente. La Karsh International Scholarship fue la encargada de darle la beca cubriéndole el coste completo de los cuatro años de su carrera universitaria. El proceso de selección para poder acceder a este centro de Estados Unidos también fue arduo, con entrevistas y redacciones escritas que tuvo que superar. De hecho, el año académico en Duke University está valorado en más de 80.000 dólares. Hoy en día Alberto García ha acabado su segundo curso universitario de Química, Ciencias Ambientales y Traducción e Interpretación de ruso, con una nota media de 9,6.
Sus retos y su futuro
Durante el año que viene, el estudiante tiene la intención de realizar un proyecto de investigación sobre la calidad toxicológica del agua en un arroyo de la ciudad de Durham. “Al acabar, me gustaría trabajar en el sector privado durante un tiempo, idealmente en una startup, me gusta mucho el ambiente de ideas novedosas y trabajo rápido, y más tarde, quizás continuar mis estudios con un máster o un doctorado”, explica Alberto.
Armenia, Georgia y Ucrania serán sus destinos este verano con el objetivo de practicar idiomas y de visitar antiguos compañeros. Le apasiona el hecho de viajar y establecer conexiones con otras culturas. “Mi historia es también la de todas aquellas personas que me auparon en sus hombros para ver horizontes más lejanos que ni yo mismo imaginaba”, agradece Alberto García.
