La sociedad actual necesita contar con profesionales especializados. En este sentido, la formación juega un papel vital. Sin embargo, son tantas las opciones disponibles en el mundo educativo que a menudo aparecen las dudas. ¿Estudiar un máster? ¿Iniciar un doctorado? ¿Matricularse en un curso de especialización? Se trata de tres caminos muy diferentes que buscan un perfil de estudiante distinto. No obstante, son tres posibilidades perfectamente compatibles. Según nuestro perfil profesional y según el momento vital en el que nos encontremos, nos decantaremos por una vía u otra. En este post te explicamos en qué consiste cada opción. Alguna de las tres se ajustará a lo que necesitas. ¡Anímate a probarlo!
¿Qué me aporta un curso de especialización?
¿Siempre te has quedado con ganas de saber más sobre literatura? ¿Te atrae el mundo del Derecho? ¿Quieres especializarte en Veterinaria? Pues quizá deberías empezar un curso de especialización. Los cursos de especialización ofrecen formación específica de una materia, desde la Agroalimentación hasta la Educación o la Medicina. Cualquier disciplina es apta para ser explicada. Este tipo de cursos no requieren titulación universitaria y normalmente son de corta duración.
La orientación de estas formaciones es más bien práctica. Por este motivo, la docencia suele ir a cargo de profesionales ajenos a la universidad. Aunque estos cursos están pensados para un público muy variado, la mayoría tienen requisitos de acceso o criterios de admisión. Los elementos de valoración más importantes son el nivel de idiomas, el currículum vitae o el orden de inscripción. Los cursos de especialización se diferencian de los MOOC por el precio de la matrícula. En este caso, las formaciones no son gratuitas pero garantizan la obtención de un título o certificado. En todo caso, los cursos deben ser entendidos como un complemento y no como una vía de profesionalización.
¿Cuáles son las ventajas de un máster?
Los estudios de máster también son conocidos como estudios de segundo ciclo. Están pensados para titulados universitarios que quieran especializarse en cualquier ámbito. Aunque normalmente los alumnos escogen másteres vinculados a su formación previa, no es necesario que siempre sea así. El segundo ciclo universitario suele alargarse entre uno o dos cursos. No obstante, la amplia oferta de másteres a distancia permite adaptar los períodos a gusto del alumno. Cualquier momento es bueno para iniciar un máster. De todas formas, antes de matricularse hay que consultar los requisitos de acceso y los planes de estudio. A día de hoy, todos los estudiantes deben defender un Trabajo de Fin de Máster (TFM) para obtener el título. El TFM es un proyecto de investigación propio en el que el estudiante pone a prueba los conocimientos adquiridos.
Para algunos alumnos, los másteres representan una oportunidad para estudiar en el extranjero. Para otros, son un simple trámite para ejercer como profesor de Secundaria o iniciar un doctorado. En todo caso, siempre hay que tener clara la diferencia entre un título propio y uno oficial. Actualmente, los másteres son un complemento imprescindible para la mayoría de estudios de grado, una especie de quinto año de los antiguos planes de licenciatura.
¿Me puedo plantear un doctorado?
El doctorado es el grado máximo de especialización universitaria. Aunque se trata de una opción muy atractiva para aumentar nuestros conocimientos, debemos tener realmente claro que nos apetece realizar una tesis. De hecho, hay quien considera que el doctorado es un proyecto de vida. Según datos del Ministerio de Educación, Cultura y Deporte, los estudios de doctorado suelen alargarse entre tres y cinco años. Sin embargo, esta cifra varía en función de los intereses y las obligaciones de cada alumno. Para acceder al tercer ciclo, es imprescindible tener un título de máster oficial.
Hoy en día, la oferta de becas y la posibilidad de cursar el doctorado a distancia facilita bastante las cosas. Eso sí, no podemos obviar que, como en todos los proyectos a largo plazo, a menudo aparecen sensaciones de cansancio o frustración.
A grandes rasgos, el tercer ciclo tiene dos finalidades:
- Proporcionar formación avanzada en investigación.
- Formar al estudiante como futuro docente universitario.
Así pues, si tu futuro pasa por las aulas universitarias o por la investigación científica, esta es la opción que necesitas. Sea como sea, hay que valorar la magnitud del proyecto y marcarse objetivos realistas para disfrutar de la experiencia.
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Fuente: Universidad Autònoma de Barcelona
